Participación ciudadana…

La participación ciudadana surge de la necesidad de democratizar las relaciones entre el gobierno y la sociedad civil como un elemento modernizador de la democracia como sistema político.

Es el proceso mediante el cual los ciudadanos, en forma directa o mediante sus expresiones asociativas, inciden en ciertos procesos gubernamentales definitorios de políticas públicas. Es decir, por medio de la participación ciudadana individuos, comunidades y sectores sociales organizados tienen la oportunidad de intervenir de distintas maneras en la resolución de determinados asuntos de interés colectivo.

Es importante para toda sociedad contar con mecanismos que le permitan tener control sobre sus gobernantes, de esta manera se estaría actualizando la democracia, pasando de una democracia representativa a una participativa, es decir, a una democracia ampliada, en donde los ciudadanos interactúan con sus representantes.

A través de la historia, hemos visto cómo muchos gobernantes de los diferentes países del mundo han abusado del poder que les confiere el pueblo, éstos se han dedicado a otras cosas menos a atender las necesidades, peticiones y reclamos de los ciudadanos.

Esto ha provocado que en algunos de los casos se hayan dado brotes de violencia y resistencia de la sociedad civil en contra de quienes gobiernan.

Considero que estos actos a ninguna sociedad le convienen, ya que frenan el desarrollo y el bienestar del lugar en donde se originan estos conflictos.

Afortunadamente la sociedad civil organizada ha vivido un intenso proceso de crecimiento en todo el mundo y este fenómeno ha estado también presente en México y Jalisco. Los ciudadanos a través de sus organizaciones, asumen papeles y ocupan espacios antes reservados sólo a los gobiernos. La nueva presencia ciudadana es uno de los hechos que definen ahora a la modernidad y una de las mayores esperanzas en la construcción social del siglo XXI.

La participación ciudadana en los últimos años se ha convertido en uno de los principales temas de interés nacional, se hace referencia a este punto como uno de los instrumentos necesarios para el ejercicio de la soberanía; no como acto electoral, sino además como un acto voluntario, continuo y dinámico donde cada una de las personas que se involucran en la acción deben implicarse en la toma de decisiones, sea en el ámbito nacional, estatal o municipal.

México se encuentra en un profundo proceso de desarrollo de su democracia. El reconocimiento de la compleja pluralidad de la sociedad, la necesidad de la ciudadanía de involucrarse en los asuntos públicos, obliga a la revisión y construcción gradual de mecanismos y espacios para lograr un proceso de acciones compartidas entre instituciones y sociedad en cuanto al actuar de ambos.

De ahí la necesidad de incorporar instrumentos jurídicos como el plebiscito, el referéndum, la iniciativa popular, entre otros en todas las legislaciones del país, las cuales servirán a la sociedad para vigilar y supervisar el actuar de quienes ostentan el poder.

En Jalisco contamos con estos mecanismos tanto en nuestra Constitución como en el Código Electoral y de Participación Ciudadana, lo que nos coloca como el estado que cuenta con herramientas jurídicas electorales arriba de la media nacional. Sé que no tenemos una democracia perfecta, que nos falta perfeccionar algunos temas, pero considero que vamos por el camino correcto.

Es por eso que en nuestro estado se está asumiendo el reto de avanzar hacia la madurez política y consolidar nuestra democracia. El anhelo por gozar de mayores libertades de participación y de expresión, de contribuir desde la tolerancia y la pluralidad, de construir un sistema de instituciones que respaldara la toma de decisiones, ha ido encontrando reflejo en el marco legal y político en nuestro estado.

Como vemos, los jaliscienses le apostamos a la legalidad, a la transparencia y sobre todo, a la credibilidad de la sociedad, para que ésta tenga una mayor participación en temas que le son de interés común.

Sigamos confiando en las instituciones electorales, que son de las pocas que cuentan con credibilidad y reconocimiento social, participemos activamente, y no dejemos que otros decidan por nosotros, o como diría mi abuela, la democracia y la participación es responsabilidad de todos, ¿no lo creen?

Marcos Antonio Santoyo Bernal