Pizano Ramos pretende no heredar iniciativas a próximas legislaturas

Gabriela Godínez García

El diputado Héctor Pizano Ramos indicó que el pasado 27 de marzo presentaron la iniciativa de decreto para efecto de incluir la caducidad legislativa en la Ley Orgánica del Poder Legislativo, cuya introducción tiene como objeto abatir el rezago legislativo en el que se encuentran casi todas las comisiones del Congreso Estatal.

Añadió que la comisión de Puntos Constitucionales se ha convertido en una especie de filtro o embudo donde hay iniciativas que ni siquiera alcanzan a dictaminarse y que en algunos casos son heredadas de legislaturas anteriores, es decir que no tuvieron la atención o en consenso para salir adelante, lo que hace que se engrosen las estadísticas y generar ese cumulo de trabajo que pudiera estar desfasado.

“Lo que pretendemos con esta caducidad legislativa sería que  alguna iniciativa que no fuera atendida en las comisiones correspondientes en un plazo determinado sean desechadas de facto, por lo menos al cambio de la legislatura”, esto se logaría adicionando un párrafo 4to al art 155 de la ley orgánica de este Poder, estableciendo que cuando una iniciativa no haya sido dictaminada y una vez concluida la legislatura en la que se presentó tendrá efectos de caducidad legislativa que se entenderá como desechamiento de facto por no haber sido dictaminada, indicó el legislador priista.

Agregó que por el simple hecho de culminar la legislatura será suficiente motivo para que no se tenga un trabajo extra, estando abiertos para buscar ciertos parámetros debido a que cuando una iniciativa no se dictamina quiere decir que ni el promovente ha hecho las gestiones necesarias para ello o no hubo el consenso, por lo que debe hacerse es desechar y se cierre el proceso y si otro legislador tiene interés en retomarla deberá presentarla una vez más y promoverla para sacarla adelante.

Sería la comisión de Puntos Constitucionales quien tendrá que dictaminar la propuesta de Pizano Ramos, siendo la misma la que tendría mayores beneficios en aprobarla, donde uno de los problemas es que la comisión de reingeniería del Congreso no ha terminado su trabajo por ello se determinó congelar varias de las iniciativas que tenían que ver con la ley orgánica.