Mandela, su legado humanista y pacifista…

Nelson Rolihlahla Mandela nació el 18 de julio de 1918 en Mvezo, un poblado cerca de Umtata, en el Transkei. Era conocido como Madiba o Tata, político y abogado que llegó a ser presidente de la República de Sudáfrica de 1994 a 1999.

Su participación en el Congreso Nacional Africano en el cual se establecía la ideología de un socialismo africano: nacionalista, antirracista y antiimperialista desde ahí encabezó la Campaña de desobediencia civil en 1952, así como en el Congreso del Pueblo en 1955, en el cual se establece la lucha en contra del apartheid. El ideal humanista y pacifista de Mandela, inspirado en Mahatma Gandhi, logró posicionarse como uno de los personajes más importantes en el mundo en donde su legado ha quedado plasmado en la historia de la humanidad.

Sus acciones hicieron que el gobierno de Sudáfrica lo encarcelara en varias ocasiones, la primera en1956, estando en prisión hasta 1961. En 1962, es detenido por segunda vez en Johannesburgo, acusado de incitar a los trabajadores a la huelga y salir del país sin permiso. La tercera detención de Mandela es en 1964 en la isla de Robben, aquí dura en prisión 17 años en condiciones verdaderamente lamentables. Pasa diez años más en dos prisiones, sumando un encierro de 27 años, tiempo en el cual pasó de todo, torturas, humillaciones y vejaciones, las cuales soporto siempre con la frente en alto. Nelson Mandela fue reconocido como el líder negro más importante en su país y fuera de él por defender y estar al frente de la lucha contra el apartheid, en la cual se establecía la falta de libertad de las personas de color en Sudáfrica.

En1982 Madiba fue trasladado de la isla de Robben a la prisión de Pollsmoor, junto con otros líderes del Congreso Nacional Africano. Con esto se pretendía acabar con la influencia que éstos ejercían sobre la nueva generación de jóvenes activistas negros encarcelados en Robben Island. En1985 el presidente Botha ofreció la liberación condicional de Mandela a cambio de renunciar a la lucha armada, la cual obviamente rechazó tajantemente, realizando un pronunciamiento en el cual mencionaba ¿Qué libertad se me ofrece, mientras sigue prohibida la organización de la gente? Sólo los hombres libres pueden negociar. Un preso no puede entrar en los contratos, de ese calado era Mandela.

Durante el largo tiempo en que Mandela estuvo preso, se originaron muchas presiones internacionales para que se le dejará en libertad, a lo que el gobierno sudafricano no cedía, fue hasta la muerte del presidente Botha cuando deciden liberarlo por indicaciones del recién nombrado presidente Frederik Willem de Klerk en 1990, ya libre, Mandela y Klerk inician las negociaciones para comenzar con la democratización de Sudáfrica, lo que provocó que ambos recibieran el Premio Nobel de la Paz en 1993.

En 1994 Mandela se convierte en el primer presidente negro de Sudáfrica, inicio con la política de reconciliación nacional, manteniendo a Frederik Willem Klerk como vicepresidente y la creación de una nueva Constitución en donde se establecían garantías y derechos para todos, su periodo termina en 1999 retirándose de la vida política. Nelson Mandela recibió alrededor de 50 doctorados honoris causa por distintas universidades del mundo, ha sido el único extranjero distinguido con Bharat Ratna, el premio civil de mayor prestigio de la India. Asimismo recibió la Orden del Águila Azteca, Arthur Ashe Award, Escultura en el Palacio de Westminster, Londres, Embajador de la Conciencia, premio otorgado por Amnistía Internacional, Orden al Mérito del Reino Unido, Premio Nacional de La Paz, Premio Nobel de La Paz, Premio de la Paz de Mahatma Gandhi, Orden Nacional José Martí, Cuba, Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional, Premio Internacional Simón Bolívar, entre otros.

Mandela falleció el pasado 5 de diciembre a sus 95 años, dejando todo un legado que las generaciones actuales y futuras deben de continuar para lograr una reconciliación, no sólo en Sudáfrica, sino en todo el mundo. Madiba terminó con la discriminación, mas no con la injusticia de su país como él hubiese querido. O como diría mi abuela, para vivir en armonía en este planeta, es menester erradicar la discriminación en todos sus aspectos, la injusticia y la desigualdad social ¿No lo creen?

Marcos Antonio Santoyo Bernal